Como se esperaba, el BCE aplicó una subida de tipos de 50 puntos básicos (pb). Además, Lagarde desveló su intención de aplicar otra subida de 50 pb en marzo. El Consejo de Gobierno mantuvo su mensaje de subir los tipos «significativamente», «a un ritmo constante» y «manteniendo los tipos de interés en niveles restrictivos». Por tanto, podría pensarse que el BCE continúa en la senda de la política monetaria dura. Sin embargo, los mercados reaccionaron como si el BCE acabase de anunciar una rebaja de tipos: bonos de la zona euro registraron un fuerte rally y el euro se debilitó.
Es evidente que el mercado está desesperado por ver un indicio de que el BCE empezará pronto a ralentizar el ritmo de endurecimiento, por la reacción moderada podría deberse en parte al posicionamiento. El hecho de que Lagarde calificase de «más equilibrados» los riesgos de inflación y crecimiento también habrá dado confianza a los inversores en renta fija. Sin embargo, este rally parece prematuro: la inflación general continúa muy lejos del objetivo, la subyacente aún no se ha reducido significativamente y, como se ha visto recientemente en España, la inflación subyacente aún puede sorprender al alza.
No hay mucho más que añadir sobre el endurecimiento cuantitativo europeo a lo que ya oímos en la reunión de diciembre, aparte de que las reinversiones serán muy proporcionales en las carteras APP y las reinversiones de la cartera de bonos corporativos del BCE (CSPP) se orientarán hacia emisores con mejores credenciales climáticas. Todavía no está claro cómo se definirán esas credenciales, pues se basarán en una combinación de medidas, que van desde las emisiones absolutas hasta las buenas prácticas de divulgación de información. Sospecho que los inversores se centrarán en qué bonos compra y vende el BCE cada semana para averiguar quién está en la lista de los «malos».
Comentarios breves
Houston, tenemos un problema difícil
Por Carlo Putti
Tras la publicación ayer del IPC de EE. UU., el objetivo del 2% parece cada vez más lejano con respecto a lo que refleja actualmente el mercado. La inflación estadounidense se situó en el 6,4% interanual en enero, frente al 6,2% esperado, mientras que la inflación subyacente aumentó un 0,4% en el mes, hasta el 5,6% interanual (frente al 5,5% previsto).
El componente problemático de la cesta de la inflación (principalmente los servicios) sigue por las nubes, mientras que los bienes básicos, que llevaban varios meses a la baja, volvieron a registrar un dato positivo.
Sin embargo, la conclusión más importante de la inflación de ayer fue que el aumento de la inflación fue muy generalizada, lo que evidencia que las presiones inflacionistas no se están relajando tanto como creía inicialmente el mercado. Aunque seguimos en un entorno desinflacionista, aún queda mucho por hacer antes de que podamos cantar finalmente victoria sobre la inflación.
El BCE sube los tipos 50 pb y habrá más subidas
Por Gareth Jandrell
Como se esperaba, el BCE aplicó una subida de tipos de 50 puntos básicos (pb). Además, Lagarde desveló su intención de aplicar otra subida de 50 pb en marzo. El Consejo de Gobierno mantuvo su mensaje de subir los tipos «significativamente», «a un ritmo constante» y «manteniendo los tipos de interés en niveles restrictivos». Por tanto, podría pensarse que el BCE continúa en la senda de la política monetaria dura. Sin embargo, los mercados reaccionaron como si el BCE acabase de anunciar una rebaja de tipos: bonos de la zona euro registraron un fuerte rally y el euro se debilitó.
Es evidente que el mercado está desesperado por ver un indicio de que el BCE empezará pronto a ralentizar el ritmo de endurecimiento, por la reacción moderada podría deberse en parte al posicionamiento. El hecho de que Lagarde calificase de «más equilibrados» los riesgos de inflación y crecimiento también habrá dado confianza a los inversores en renta fija. Sin embargo, este rally parece prematuro: la inflación general continúa muy lejos del objetivo, la subyacente aún no se ha reducido significativamente y, como se ha visto recientemente en España, la inflación subyacente aún puede sorprender al alza.
No hay mucho más que añadir sobre el endurecimiento cuantitativo europeo a lo que ya oímos en la reunión de diciembre, aparte de que las reinversiones serán muy proporcionales en las carteras APP y las reinversiones de la cartera de bonos corporativos del BCE (CSPP) se orientarán hacia emisores con mejores credenciales climáticas. Todavía no está claro cómo se definirán esas credenciales, pues se basarán en una combinación de medidas, que van desde las emisiones absolutas hasta las buenas prácticas de divulgación de información. Sospecho que los inversores se centrarán en qué bonos compra y vende el BCE cada semana para averiguar quién está en la lista de los «malos».